
Desarrollamos planes a medida para evitar la contaminación de alimentos.
Los alimentos, tanto al ser manipulados como al ser cocinados o envasados, están en contacto con distintas superficies, las cuales deben estar siempre limpias de bacterias y hongos para que no se transmitan a los alimentos. Los brotes implicados con mayor frecuencia en brotes de intoxicación alimentaria son Salmonella, Staphylococcus y Clostridium perfrigens.
En la industria alimentaria, es esencial cuidar con detalle cualquier superficie de trabajo que entre en contacto con un alimento o producto. En este sentido, es vital cumplir con las normas establecidas y llevar a cabo un elaborado plan de con medidas de higiene y saneamiento. Con esto conseguimos reducir el riesgo de contaminación microbiana , evitando las consecuencias a nivel económico y de salud de posibles intoxicaciones.